El lago de los cisnes es un ballet clásico, que seguramente hemos escuchado nombrar en un sin numero de ocasiones, y en el inconciente colectivo, es entendido como la danza sublime, representando la perfección en uno de los artes más difíciles de todos: bailar con técnica clásica. Y lo más probable es que a pesar de ser un clásico, no muchas personas han tenido la oportunidad de ver la obra completa en todo su esplendor. Sabemos un poco de que se trata, pero realmente no tenemos idea de cómo se desarrolla la historia. El lago de los cisnes (Chaikovski) es una obra que posee cinco actos. Se basa en la historia de un príncipe llamado Sigfrido, que debe encontrar una esposa, y para eso su madre le organiza un baile. Sin embargo, él se enamora de Odette, una princesa que conoció en un lago, y que se encuentra encantada con un hechizo que la hace convertirse en cisne todos los días, y sólo de noche puede recuperar su hermosura humana. El hechizo, creado por el mago Rothbart, sólo se puede romper si es que alguien declara el amor eterno a Odette. Para el día de la fiesta, y a modo de engaño, Rortbart se presenta con Odile, la hermana gemela y “oscura” de Odette, de manera tal de que Sigfrido se confunde y declara su amor eterno a una mujer equivocada. El príncipe se da cuenta de su error, pero ya es demasiado tarde. Finalmente, Odette y Sigfrido se suicidan en el lago, rompiendo el hechizo para las demás mujeres que también son cisnes. Muy linda historia, pero repetimos, conocida muy someramente, a pesar de lo famosa que es. Y es que las grandes obras clásicas en ballet, ópera y conciertos son de un valor intelectual y cultural que parecen ser propias de una elite que accede a estos espectáculos de manera masiva. Y aunque hayamos asistido algunas veces a ver obras clásicas, lo más probable es que las butacas de estos lugares hayan sido ocupadas en su mayoría por aquellos que ven en estos espacios la proyección de la cultura de su propio estatus social.
Esto ya casi no sucede con el cine (“casi” porque en Chile aún hay muchas diferencias, también de acceso a la cultura y a la entretención). A pesar de que en nuestro país existan grandes diferencias en lo económico, asistir al cine se ha convertido en algo transversal, ya que hay salas de multifilms en comunas y sectores de clase media-baja. Así, participar de este espacio es parte de la vida diaria de cientos de chilenos. Ahora bien, si comenzamos a pensar en que películas se estrenan en cada uno de los lugares, encontraremos muchas diferencias. Por ejemplo, Black Swan no se estrenó en el cine del mall tobalaba, en la comuna de Puente Alto. No sabemos por que motivo, pero a nuestro parecer, dice relación con una discriminación casi unilateral por parte de la empresa de cine que considera que en este sector de la sociedad, este tipo de películas no es apreciada ni es consumida. Y es que en muchas ocasiones también, cuando se piensa en los clásicos, se cree que puede ser “aburrido” para cierto público. Pero esto no es así, y por lo general, estas grandes empresas se equivocan. Porque Black Swan, film basado en la obra clásica, no tiene nada de aburrido.
La película nos mantiene atent@s y alertas en cada momento. Nos vamos involucrando en la vida de “Nina”, que tiene todas las condiciones para interpretar una parte de la obra, específicamente a Odette. Pero no puede interpretar a Otile, la malvada y oscura hermana. Así, Natalie Portman, que ya sin lugar a dudas es una de las mejores actrices jóvenes del último tiempo, comienza a mostrarnos la transformación mental que debe experimentar Nina para lograr la perfección. Se siente pena y compasión, pero también siempre hay mucha tensión y sin duda un final inesperado, a pesar de que existan muchas cosas previsibles. Es una excelente película, hecha para ganar un oscar. Y sin duda, la mirada de Natalie Portman, su voz confusa y temerosa, y todo ese brillo que cautiva a millones en el mundo, es la mejor interprete para explorar toda la luz y oscuridad de lo que quiere transmitir este clásico. Navegamos. Como seguramente lo hace la aplaudida lago de los cisnes, y que como ya hemos dicho, pocos han tenido la oportunidad de hacerlo de manera real.
Es una gran película, aborda gran parte de las sensaciones que una puede sentir, amor, pasión, frustración, envidia, decepción, erotismo, placer, miedo, euforia...
ResponderEliminarAdemás, hay un análisis muy interesante en cuanto a la construcción de identidad, tiene muchos elementos propios del género y de las bailarinas.. es una excelente película, merecía el oscar..